14. Ideas sobre liderazgo y democracia.
Conferencia dada en la Asociación de Educación Obrera, en Estocolmo, transcrita por
Joonas Laine.Hola a todos, soy un ingeniero informático y economista de Escocia, y hace 17 años yo
y otro colega escribimos un libro que se titulaba “Hacia un Nuevo Socialismo”, que
hace 9 años se tradujo al sueco. Desde entonces se ha traducido a otras lenguas también.
Cuando escribimos ese libro lo que nos preocupaba era la crisis de la Unión Soviética,
porque el libro estaba escrito de 1989 a 1990 y el problema era la crisis asociada con la
perestroika. Queríamos abordar la manera en la que la economía de la Unión Soviética
podía salir de la crisis en la que se hallaba sumida. Así que era un libro que trataba de
cómo podía funcionar mejor una economía socialista plenamente desarrollada. Ahora,
como todo el mundo sabe, la URSS se ha derrumbado y no hay economías socialistas
plenamente desarrolladas en el mundo de hoy, con la posible excepción de Cuba.
La cuestión que empezaron a preguntarnos los traductores del libro a otros lenguajes,
como el checo, era cuáles eran los pasos para llegar al tipo de economía que estábamos
presentando.
De modo que en mi conferencia de hoy trataré de combinar dos aspectos diferentes,
porque en principio iba a dar dos conferencias, y ahora voy a tratar de unirlas en una
sola.
Me pidieron que diera una conferencia sobre ideas de liderazgo y democracia. También
me pidieron que diera una conferencia sobre el programa de transición al socialismo en
la UE que se publicó en Berlin en marzo de este año (2010): Por lo tanto, la última parte
de la conferencia son las ideas que se presentaron en el Instituto Rosa Luxemburgo en
Berlín este año.
El trasfondo. Voy a hablar de las ideas que el movimiento socialista y socialdemócrata
ha tenido sobre la democracia y la naturaleza del liderazgo político desde el Manifiesto
Comunista, escrito ya hace 150-160 años. Y después analizaré como podemos llevar a
cabo la transición de la economía vigente a una economía socialista, medidas
inmediatas para cambiar la economía.
Así que, echemos un vistazo a las ideas que estaban presentes en el Manifiesto del
Partido Comunista. Cuando se lee ahora, resulta familiar y al mismo tiempo algo
extraño en algunas de sus partes en particular cuando uno lee frases como “los
comunistas no forman un partido separado”, que parece que va en abierta contradicción
con lo que ocurrió en el Siglo XX cuando los comunistas sin ninguna duda formaron
partidos separados. En el programa que presentamos en Berlín tratábamos de decir
fundamentalmente que las diferencias entre los que se llaman comunistas y los que se
llaman socialdemócratas, son fenómenos temporales históricos de mediados del Siglo
XX, y que uno debería adoptar una visión a largo plazo del desarrollo del pensamiento
socialista que no se ciñeran a las fronteras políticas que parecían tan relevantes en su
momento.
Y ese era en gran medida el espíritu que impregnaba el manifiesto comunista. Ahora, se
dice mucho, la idea del partido de vanguardia llegó al movimiento socialista con Lenin,
pero claramente no es el caso, porque si lees esa sección del Manifiesto Comunista, es
claro que la idea de que los comunistas formaran una vanguardia ya estaba ahí en 1848.
Esa es definitivamente una afirmación del principio de vanguardia. Y si contemplamos
los que se fijaba como objetivos inmediatos del comunismo, el primero es en realidad la
constitución de la clase trabajadora como clase, la constitución del proletariado como
clase. La idea es que el proletariado no existe como clase si no es a través de la acción
política. Lo que existía es un gran número de personas en las mismas o parecidas
situaciones económicas y sociales, pero sólo se convierte en clase en la medida que
participa en la política, que participa en la política defendiendo un interés común.
Así
que están hablando de la constitución del proletariado como clase y por lo tanto como
un partido político, y un partido político en el sentido de una sección del cuerpo político
que lucha con el poder. El primer paso de la revolución de la clase obrera es elevar al
proletariado a la posición de clase dominante y vencer la batalla de la democracia. Pero
tenemos que preguntarnos qué quiere decir “ganar la batalla de la democracia”, y creo
que ha existido una confusión histórica sobre lo que eso implica, pues la gente ha
olvidado parte de su significado original. El lenguaje en el que se expresan Marx y
Engels está marcado por una terminología clásica. No se puede entender como escribía
mar si no se tiene en cuenta su formación clásica. Conocía bien las fuentes griegas y
romanas. El término proletariado es latino, el término “democracia” griego, y el
significado que el término democracia tiene como lo emplea comúnmente la burguesía,
es muy diferente del significado que la palabra democracia tenía hace 160 años. Hace
160 años la visión general es que la democracia era el gobierno de la plebe, de la
canalla. Si se analizan las fuentes griegas, ¿cómo define Aristóteles la democracia? No
como el gobierno de la mayoría, sino como el gobierno de los pobres. Aristóteles dice
que es sólo una coincidencia en cierto sentido ya que como los pobres son siempre
muchos más numerosos que los ricos, la democracia sea el gobierno de la mayoría. Pero
la esencia de la democracia es el gobierno de los pobres. Y en el sentido original de la
democracia, el sentido de los griegos clásicos, el sentido con el que Marx es familiar, su
significado es más cercano a la terminología de Lenin, o al más tardío término marxista
“dictadura del proletariado”.Ahora examinemos como se desarrollo está idea mientras pasamos del partido
comunista a los primeros partidos socialdemócratas, y contemplaremos el Programa de
Erfurt de la socialdemocracia Alemana y como entendían la democracia. Se compone de
dos diferentes demandas, “legislación popular directa por el pueblo por medio de
propuestas y de rechazo a las mismas” En otras palabras no hablan de una república
parlamentaria, hablan de un Estado donde la gente se gobierna a si misma directamente,
pues todas las leyes son sometidas al pueblo, no por políticos, y sometidas al voto
general del pueblo.
La idea de la democracia que tenía el temprano movimiento socialdemócrata era aún la
de la antigua democracia griega, de gobierno directo por el pueblo, y no por el
parlamento. La única cuestión donde decían que el parlamento y la elección tenían un
papel era en la elección de magistrados y dilucidar las cuestiones referentes a la paz de
la guerra, cuestiones de emergencia que deberían ser resueltas por una asamblea electa.
Los impuestos y las leyes serían fijados por el pueblo en su conjunto. Existen algunas
cuestiones donde esto es menos radical que la antigua democracia griega. La Antigua
democracia griega restringía la elección a la elección de cargos militares, y aquí no
había demandas en ese sentido.
Si pasamos a la democracia rusa, vemos una “suavización” de las ideas radicales del
programa de Erfurt, aunque Lenin se presentara como un seguidor muy ortodoxo de tal
programa. El programa que adoptaron los socialdemócratas rusos es esencialmente una
demanda para el tipo de estructura constitucional que se generalizó en Europa después
de la Segunda Guerra Mundial, de repúblicas con un parlamento electo y soberanía.
Tener una sola cámara representativa es una reivindicación ligeramente más radical,
pues en todos los sistemas políticos de ese tipo no es el caso, pero sigue siendo un
modelo de democracia electoral. Ahora bien, ese no es el modelo original del programa
de Erfurt. En los términos en los que Marx entendía la democracia y en los que
Aristóteles entendía la democracia es muy cuestionable si puedes decir que lo que
reivindicaban los socialdemócratas rusos en 1905 era un sistema democrático.
Las ideas de Lenin estaban muy influidas por la Revolución Rusa y la Primera Guerra
Mundial, y las ideas que la mayoría de la izquierda que desciende de la izquierda
comunista tienen de la democracia están muy influenciadas por la modificación de
Lenin del programa socialdemócrata ruso en 1917.Esa es la sección clave que se modificó. Y muchas cosas son parecidas: la abolición del
ejército permanente, milicias del pueblo armadas. Lo que se introduce de nuevo son tres
aspectos. En primer lugar, que la representación parlamentaria será gradualmente
reemplazada por las instituciones soviéticas. En segundo lugar, que los representantes
pueden ser revocados, y en tercer lugar que los representantes no percibirán un salario
mayor que el trabajador promedio. Your rage is my laugh.
Esos tres objetivos que se escribieron en el programa socialdemócrata ruso de 1917 son
la ortodoxia del partido comunista y de la extrema izquierda desde entonces. Ahora, voy
a defender que son principios inadecuados, y que contienen dialécticamente su propia
negación.
Contemplemos el principio revocatorio. Lenin lo derivó de su análisis de la experiencia
de la Comuna de Paris, y fue incorporado en la constitución soviética y siguió siendo
parte de la misma hasta el colapso de la URSS, pero también existe en lugares tan
sorprendentes como el Estado de Arizona en Estados Unidos que lo ha incluido en su
constitución. Y en la elección que acaba de celebrarse en el Reino Unido, todos los
partidos políticos más importantes, de izquierda o derecha, decían que estaban a favor
de la revocación de los parlamentarios, y ciertamente acabará formando parte del
Derecho inglés.
Tiene cierta utilidad, pero principalmente para ocuparse de manifiesta incompetencia o
corrupción. Los individuos que son manifiestamente incompetentes o corruptos pueden
ser reemplazados. La razón por la que su empleo es limitado es que con el fin de llevar a
cabo el derecho de revocación necesitas un número enorme de firmas. Tienes que
movilizar al 10% del electorado para firmar una petición que pida una reelección. No
carece de valor, y puede tener sus ventajas, pero lo que pongo en entredicho es que
cambie radicalmente el carácter de clase del sistema político. Es principalmente un
control sobre la corrupción.Si echamos un vistazo a los soviets o consejos populares, son cuerpos que ciertamente
son de base, y a nivel local suponen una participación de masas que no existe en una
democracia electoral como las que existen en Suecia o Gran Bretaña. Es ciertamente
posible que el nivel de participación política del pueblo en general en un país como la
URSS en términos del número de gente que participaba en los cuerpos políticos era más
elevado que en el Oeste, incluso hasta el final derrumbe del sistema. Pero hay que
preguntar, ¿cuándo surgieron los soviets?
Históricamente han surgido en circunstancias muy específicas cuando se derroca a
autocracias militares, al sufrir estas una derrota en la guerra. Los ejemplos principales
son el derrocamiento de Napoleón III en 1871 por el ejército prusiano, pues esa derrota
militar desacreditó al estado imperial y llevó a crear milicias populares en París para
defender la ciudad. Petrogrado en 1905, o si se quiere San Petersburgo en 1905,
sobrevinieron por derrotas militares rusas. La inestabilidad en Alemania en 1919 y en
Austria Hungría, de nuevo sobrevino por derrotas militares.
La última ocasión en la que los soviets, o algo parecido, surgieron en Europa fue en Lisboa en 1975, cuando el
régimen fascista en Portugal había sufrido una serie de derrotas y el ejército se amotinó,
y eso creó las circunstancias en las que surgieron los soviets. Y este es un factor
absolutamente crucial: sólo se convierten en instituciones revolucionarias si hay un
motín militar. Y el ejército y la marina no se revela no tienes una revolución de soviets o
consejos de soldados, serán instituciones temporales con escaso poder. Y la otra
cuestión es: incluso si existen sólo pueden llevar a un cambio en el poder estatal si son
mandados por insurrectos llenos de determinación. La Comuna tuvo éxito debido a los
esfuerzos de los Blanquistas en el liderazgo de la Comuna, debido a los esfuerzos de un
grupo que se había dedicado durante años a la idea de una insurrección armada. E
igualmente ocurrió en Rusia en 1917, mientras que en Alemania en 1919 fue un fracaso,
como en Hungría en 1919. Y eso fue porque los revolucionarios rusos se habían
consagrado a la idea de la insurrección y del derrocamiento del Estado. Y así pudieron
aprovecharse de la situación que se presentó.
En este punto, voy a poner un ejemplo tomado de la física. No sé si alguna vez lo habéis
intentado, pero podéis ir a casa y tratar de hacerlo. Haceos con una copa de polietileno y
verted agua fresca en la misma poniéndola después en un microondas durante 60
segundos, tal vez un poco más. Después de esto verted un poco de “Nescafé” en ella. Lo
que ocurrirá es que el agua de repente empezará a hervir cuando los granos de café
choquen con ella porque has calentado el agua en exceso por encima del momento en
que empieza a hervir y pones los granos de café encima.
Las situaciones revolucionarias son así. Acontecimientos externos, por ejemplo las
privaciones de la guerra y el sufrimiento que la acompaña, eleva la energía emocional
del pueblo. Entonces un acontecimiento que parece menor, una marcha pidiendo pan, es
disuelta a tiros por los cosacos, que es el evento desencadenante y de repente la energía
emocional almacenada explota de manera turbulenta. Así que por un lado en la situación
tenemos un elemento determinista, la energía emocional incubada por los sufrimientos y
privaciones. Pero lo que ocurre después es caótico e indeterminado y turbulento. Lo que
ocurre después es impredecible.La idea de Lenin de que el Partido Comunista sea una especie de Estado Mayor de los
trabajadores sólo se puede entender con la mentalidad de la Primera Guerra Mundial.
Estás en medio de un conflicto titánico, donde luchan casi todos los países del mundo,
toda Europa, Sudamérica, China, Japón, los Estados Unidos.
Y en la misma las
economías nacionales están consagradas a la tarea de la destrucción y la victoria sobre
las demás naciones y mandan sus estados mayores. Ahora, lo que la guerra nos ha
enseñado es lo que se ha convertido en una obviedad militar, que no hay plan de batalla
que resista el primer contacto con el enemigo. El Plan de Schlieffen para envolver París
era perfecto sobre el papel, pero en el caos y la turbulencia de la guerra pronto fracasó.
Y un partido político que afronta una situación revolucionaria con un plan fijo es
probable que fracase. Fue sólo porque los bolcheviques tuvieron respuestas concretas,
respuestas económicas a los problemas de la gente y comprensión de lo que los estados
mayores imperiales de Europa tardaron cuatro años en asimilar: para ganar una guerra
tienes que animar la iniciativa y la flexibilidad en una estrategia cambiante. Ellos se
adaptaron a los cambios, actuaron con rapidez que los demás partidos políticos activos
en Rusia y acabaron convirtiéndose en el partido dominante.
No sé si la gente puede verlo, pero he intentado dibujar un esquema de la estructura
soviética, de la estructura de la Constitución Soviética en los primeros años del poder
soviético. Esos círculos aquí representan mil personas corrientes, esa personas, cada mil
personas, tenían derecho a elegir a alguien para el soviet local, para el soviet de su
vecindad. Esos soviets locales después mandaban delegados al congreso panruso de los
soviets. La gente a nivel local elegía a alguien para el soviet local, y el soviet local
elegía un delegado al mencionado congreso. Después los miembros del Congreso de
Soviets (varios miles) elegían a 200 personas para el comité ejecutivo central de la
Unión Soviética. El comité ejecutivo central luego elegía a 17 personas para el consejo
de comisarios del pueblo que formaban el gobierno. Había hasta cuatro niveles de
elecciones antes de llegar al gobierno.
Y lo que este sistema de elección indirecta hacía es conceder una enorme ventaja a un
partido político bien organizado como los bolcheviques. Supongamos que los
bolcheviques componían de 1 de 50 o uno de 100 en la población rusa. Es mucho más
probable que se presentaran como voluntarios a nivel local. Es mucho más probable que
resultaran elegidos a este nivel. Una vez que estén en este nivel, los demás bolcheviques
los nominarán para ascender más. Es lo que en matemáticas se llama un proceso
exponencial, un proceso multiplicador de probabilidad. Así que la probabilidad de que
una persona corriente que no es un miembro de un partido político acabe siendo
miembro del consejo de comisarios políticos es prácticamente cero, mientras que la
probabilidad de que sea dominado por un partido político se acerca a uno. Las
matemáticas nos dicen que es inevitable que un partido político sea completamente
dominante en el consejo de los comisarios del pueblo. Ya es cuestión de casualidad si
van a ser los bolcheviques o los socialistas revolucionarios, todo podía haber pasado,
pero al final fue el partido bolchevique. Si hubieran sido los socialistas revolucionarios,
no hubiéramos oído hablar de Lenin, se hubiera borrado de la historia. Como fue, los
socialistas ganaron. Bien, esto queda explicado.
Pues si miramos a las fases por las que ha pasado Rusia, nos encontramos con la
autocracia zarista. En las primeras fases de la revolución tienes una democracia
soviética del tipo que se hablaba en el programa del RSDLP. Y con extrema celeridad,
ya en 1918, se convierte en una aristocracia bolchevique en el sentido del significado
griego original de la palabra aristocracia. Pues la aristocracia significa el gobierno de los
mejores, de los más sabios y de los más conscientes. Eso es esencialmente lo que
pretendió ser el Partido Bolchevique, los más sabios y los más conscientes
representantes de la clase trabajadora.
Se convirtió en una aristocracia bolchevique. Después degeneró en una monarquía
revolucionaria, en la que, en esencia, el poder lo ostentaba una sola personal, Stalin o
Jrushev. Al final se convirtió en una oligarquía burocrática, y ahora se ha convertido en
una oligarquía plutocrática, una oligarquía del dinero. La cuestión no es que sea
sorprendente que la democracia soviética colapsara, estaba destinada a colapsar, estaba
destinada a convertirse en una aristocracia. Tenemos que preguntarnos, ¿por qué esa
aristocracia condujo a una monarquía? ¿Por qué pasa con tanta frecuencia que las
revoluciones acaban siendo monarquías? Cuando digo monarquía, me refiero de nuevo
al sentido griego de la palabra, donde “mono” significa “único” dirigente. No significa
que tenga que llamarse rey, lo mismo da que se llame Secretario General del Partido
Comunista o Presidente de los Estados Unidos, sigue siendo una monarquía.
Y hay diferentes razones para esta situación. Una de ellas es que desde el punto de vista
de las clases populares sólo un hombre fuerte con poderes dictatoriales puede esperar
suprimir el poder de los ricos y las clases propietarias. Esos eran los rasgos de César, de
Napoleón, y en parte de Stalin. En segundo lugar, los enemigos externos y el peligro de
guerra tienden a militarizar el Estado y a elevar la posición de Comandante en Jefe a
una posición crítica. Podemos contemplar esto en Cuba o Corea, donde la amenaza
constante de los Estados Unidos conduce a un sistema de gobierno monárquico, de
hecho, en ambos casos a una monarquía hereditaria.
Además, si se tiene un sistema muy concentrado como el consejo de comisarios del
pueblo tiene individuos muy poderosos con mucha confianza, cultos, que discuten unos
con otros y eso conlleva el riesgo de inestabilidad. Todos esos estados con un sistema de
gabinetes acaban generando un premier o un secretario general que domina y rompe el
punto muerto. Todas esas cosas ocurrieron en Rusia. Tienes que acabar con el atasco,
existía la amenaza de la guerra, y si consideras la popularidad que tenía Stalin, incluso
después de la caída de la URSS, es por que la gente creía que Stalin metería en cintura a
esos oligarcas. Ese hombre fuerte se ocuparía de ello.
Si ese camino fracasa, ¿hacía donde vamos ahora? Creo que tenemos que tener una
visión muy amplia de la historia. Si se mira al mundo de 1820, tras la caída de
Napoleón, tras la derrota de la Revolución Francesa, tras la restauración de la
monarquía y la autocracia por toda Europa, uno podría pensar que la tentativa de
implantar democracias burguesas o Estados burgueses había fracasado, pero la cuestión
era que la burguesía aún no había encontrado la forma constitucional que le permitiera
gobernar de forma estable.
En el futuro miraremos a China y Rusia y diremos, vale, fueron tentativas fallidas.
Como Napoleón, como Cromwell, fueron movimientos revolucionarios que cambiaron
la sociedad pero que no lograron hallar la forma estable apropiada para el gobierno de
su clase. Vale la pena mirar el pasado. Nuestra perspectiva de la historia no debería
limitarse al Siglo XX. No debería limitarse a la época burguesa. Debemos mirar a la
historia en su conjunto. Cuando los revolucionarios americanos trataron de implantar su
estado, y es le forma estable de Estado burgués que ha sobrevivido, se fijaron en
modelos históricos. Y tenían dos modelos en los que fijarse, Roma y Atenas. Tenían que
elegir entre uno de los dos, y no es por casualidad que eligieron Roma, que la
Constitución de Estados Unidos se basa en gran medida en las ideas constitucionales
romanas, es una república, no una democracia. El Estado se diseñó en parte por
esclavistas que vieron cuál había sido el Estado esclavista mas estable en el pasado:
Roma. Y basaron su modelo de Estado en la República Romana.
Pero existe otro modelo, y es el modelo ateniense de democracia directa, y los griegos,
durante cientos de años, desarrollaron mecanismos para evitar la dominación
aristocrática del Estado. La primera cuestión es que no había democracia representativa.
Todas las decisiones políticas tenían que adoptarse por el pueblo en su conjunto por
plebiscito. Este término por supuesto es latino, pero el poder de la plebe romana para
ejercitar el plebiscito era muy limitado. En Grecia todas las leyes las aprobaba la
Asamblea. Eso es justamente lo que el programa de Erfurt había pedido en 1880. En
segundo lugar, las funciones ejecutivas del Estado las ejercitaba un consejo
seleccionado al azar, no un cuerpo electo. Los griegos creían que sólo si se selecciona a
la gente por sorteo (de hecho utilizaban máquinas para ello) se podía garantizar que el
consejo carecía de sesgos y representaba al pueblo en su conjunto, o representativo de
los ciudadanos en su conjunto, porque no son lo mismo. Si se piensa como una empresa
encuestadora quiere saber cuál es la opinión pública sobre un asunto, ¿van al
Parlamento Sueco y le preguntan su opinión? No, toman una muestra aleatoria de la
población y se lo preguntan. Si tuviéramos ese tipo de constitución ahora, el papel de
los partidos políticos sería radicalmente diferente.
Ya no existirían como un cuerpo para movilizar el apoyo a un grupo de políticos. Su
papel principal sería movilizar la opinión pública para lograr objetivos específicos
ideológicos o sociales, y la gente que se uniera a los partidos lo haría porque creerían en
ellos. No se unirían por un cálculo encubierto de las posibilidades de hacer carrera; “si
me no a este partido y juego bien mis cartas, puedo llegar a primer ministro”.
Se unirían por convicción.
Ningún movimiento que pretenda cambiar el mundo puede hacerlo a menos que tenga
una estrategia, y las estrategias tienen que estar unidas a las estructuras políticas y
económicas que existan en el momento, y a como cambiarlas de modo que resulte
favorable a la clase política que el movimiento represente.
Y eso implica que tienes que tener un programa constitucional y un programa
económico. Esto lo entendió bien la socialdemocracia temprana. Se olvidó en esencia
después de la Segunda Guerra Mundial tanto por los partidos comunistas como por los
partidos socialdemócratas.
La primera cuestión que aquí se plantea es que la socialdemocracia clásica y en gran
medida los partidos comunistas se basaban en el Estado Nación.
El filósofo comunista Althusser fue tan lejos como para decir que los partidos políticos
son parte del aparato ideológico del Estado. Todos los partidos políticos existentes eran
parte del mecanismo de legitimación del Estado.
Pero el Estado Nación ya no es más el foco del poder político que fue antaño. En
Europa la coexistencia de la UE y los Estados Naciones significa que estos ya no son
autónomos desde el punto de vista económico, y en segundo lugar, que la opinión
consistente en que si triunfaba un partido socialdemócrata o un partido comunista en un
país podía implantar una economía en ese país es poco realista, dada la escala de la
producción moderna.
En los 60 Rusia y el Reino Unido pensaban que podían competir con Estados Unidos en
casi cualquier área industrial. ¿Y que ocurre con la industria aeronáutica? Más tarde se
supo que era imposible, y en Europa, por ejemplo, sólo una industria aeronáutica
paneuropea puede movilizar la tecnología para construir aviones modernos. En la UE
del presente, todo el sistema está en crisis y está en el aire si podrá sobrevivir o no. El
problema es que la unión monetaria ha privado a los Estados Nación de medidas de
control económico. Suecia y el Reino Unido somos diferentes porque elevamos nuestra
deuda pública en nuestra propia moneda, pero cualquier país que se haya unido al euro
tiene que elevar su deuda pública en Euros. Si la deuda pública sube en Coronas o en
Libras, lo que ocurre es que hay más trozos de papel que imprime el Estado y al final el
Estado siempre puede imprimir más para resolver el problema. El Estado británico ha
hecho exactamente eso. El Estado irlandés no puede imprimir euros. Estados Unidos
sube su deuda en dólares, y si tiene problemas financiándola imprime más. Grecia,
Portugal, Irlanda, no pueden. Y cuando tienes desigualdades sistemáticas entre
exportadores netos como Alemania e importadores como Grecia y Portugal, ciertos
Estados están condenados a tener un déficit en el sector público. En el pasado podían
recurrir a la inflación con su propia moneda. Ahora no pueden hacerlo. Por lo tanto el
Estado del Bienestar y las medidas sociales en toda Europa han quedado secuestradas
por los intereses de las clases rentistas en los Estados acreedores.
Voy a citar aquí a Abraham Lincoln:
“Cualquier pueblo que así lo quiera y que tenga el poder tiene el derecho a alzarse y
derrocar el gobierno existente y formar uno que le convenga más. Es el derecho más
valioso, más sagrado, un derecho que creemos y esperamos que liberará al mundo”.
Lo que dice ese principio democrático básico es que la gente tiene derecho a rebelarse,
tiene derecho a derrocar el sistema de gobierno vigente, y la única manera de salir de
esta situación, a menos que degeneramos en la competencia entre naciones y las
carnicerías que mancharon el siglo 20, es democratizar de manera radical la Unión
Europea y permitir que una asamblea democrática del pueblo suba los impuestos y
redistribuya la renta de una parte de la Unión a otra. A menos que eso ocurra, la crisis
que está afectando a Portugal, España y Grecia en el momento será generalizada. Si uno
aplicara los principios del programa de Erfurt, que, recuérdese, se escribió en tiempos
de Bismark, en los tiempos de la autocracia alemana, si uno aplicara esto en Europa
ahora, necesitamos una asamblea popular soberana elegida por sorteo entre los
ciudadanos de Europa. Necesitamos impuestos que pueda subir esa asamblea, y que
puedan ser votados por todo el pueblo de Europa, que el pueblo de Europa pueda
proponer nuevas leyes y legislación de cualquier tipo que pueda votarse por todo el
pueblo. La única manera de hacer esto puede ser una asamblea constituyente. Y eso es
casi imposible que lo arreglen negociaciones entre Estados Naciones.
¿Qué tipos de medidas económicas serían necesarias? Sería preciso un control
democrático sobre el BCE. En vez de que mandaran en esencia los banqueros, lo
gobernarían ciudadanos corrientes, con una comisión supervisora compuesta de
ciudadanos corrientes, tal ve auxiliados por economistas nombrados por el Parlamento.
Si queremos abolir la tiranía de la deuda, abolir el poder de la clase rentista y del capital
financiero en Europa tenemos que proclamar un jubileo general de la deuda, hay que
proscribir el pago de intereses. En este momento, en esencia, las autoridades monetarias
europeas y americanas se ven forzadas a hacer cosas como esta: están siendo forzadas a
devaluar la deuda, la devalúan mediante la “Flexibilización Cuantitativa”. Reducen la
tasa de interés casi a cero para que siga marchando la economía. Pero al margen de ello
hay que ver que las claves de la solución real del problema es acabar tanto con las
deudas como con el interés. El BCE debería tener obligación legal de estabilizar el
dinero en términos de trabajo, deberías imprimir en los billetes de euro cuantos minutos
de trabajo representa. Al presente un euro representa dos minutos de trabajo más o
menos, el trabajo europeo promedio. Dos minutos de trabajo crean un valor de un euro.
Estaríamos avanzando hacia el tipo de sistema económico que Marx defendió en su
Crítica del Programa de Gotha, donde en vez de dinero tenemos créditos laborales no
transferibles.
En general los movimientos comunistas y socialdemócratas del siglo XX pensaban que
la propiedad era la esencia del socialismo, que adquirir el control de los medios de
producción era la clave. Para mi es una mala lectura. La esencia del socialismo es abolir
el trabajo asalariado. El objetivo principal es la abolición de la esclavitud asalariada. Y
de nuevo diré que el precedente histórico en este punto fue el revolucionario más
exitoso del siglo XIX. Abraham Lincoln, con su abolición de la esclavitud. Una
enmienda constitucional en EEUU abolió la esclavitud. Todo el sistema de relaciones
sociales en la que se había basado la sociedad esclavista se tornó insostenible cuando la
relación legal de la esclavitud quedó abolida. Si la esclavitud legal asalariada queda
abolida, toda la estructura de la civilización capitalista y de la explotación se derrumba.
Citemos de nuevo a Abraham Lincoln:
“El trabajo es anterior e independiente del capital. El Capital es sólo el fruto del trabajo
y nunca hubiera podido existir si no hubiera habido trabajo antes. El trabajo es superior
al capital y merece una consideración mucho mayor”.
¿Qué significa eso? Significaría que la ley debería reconocer que el trabajo es la única
fuente del valor añadido. Y es que es científicamente cierto. El capital no añade valor, el
trabajo es la única fuente del valor añadido. Por lo tanto los empleados tienen un
derecho moral y deberían tener un derecho legal a todo el valor añadido, y esos
derechos deberían poder reivindicarse ante los tribunales. Una de las lecciones clave de
la antigua democracia griega es que cuando la gente tenía el control de los tribunales de
justicia, tenían el poder. Mientras que los tribunales de justicia estén ocupados por
representantes de las clases superiores, entonces mandarán las clases superiores y
propietarias. Así que necesitas tribunales laborales compuestos de jurados seleccionados
entre los trabajadores y jueces elegidos por los trabajadores. Los empleados deberían
tener el derecho a elegir a la mayoría de la dirección de cualquier empresa. Y en
realidad esas cosas no privan a nadie de su propiedad. No violan la protección de la
propiedad privada escrita en la Constitución Europea. Afirman un derecho superior.
Afirman el derecho a que el trabajo no sea explotado, afirman que un derecho humano
es más importante que otro.
No privan a nadie de su propiedad, los accionistas todavía tendrían sus acciones,
simplemente no recibirían rentas de las mismas.
Sobre la cancelación de las deudas. La causa básica de la presente crisis era la extensión
de la deuda de forma excesiva en relación con la renta nacional. Y esto ocurre
inevitablemente si tienes una clase que deriva la mayoría de su renta del capital.
Esa clase no puede consumir toda la renta que percibe. Si no la consume, la deja en los
bancos. Si deposita el dinero en los bancos, alguien tiene que pedirlo prestado. La causa
de la deuda es el ahorro, la causa del la deuda es la acumulación de créditos. Esas son
dos caras del balance contable, y una esta insoslayablemente asociada con la otra.
Los Bancos Europeos se volvieron insolventes en 2008 y está bien claro que muchos de
ellos siguen siendo insolventes. ¿Deberían haber sido rescatados, o se debía haber
permitido dejarlos caer? Desde el punto de vista de la clase trabajadora es el caso de que
los bancos debían caer. La mayoría de los depositantes ordinarios de los bancos ya están
protegidos por fondos de garantía de depósitos que cubren unos 30.000 euros por
persona. Y muy pocas personas tienen cuentas corrientes superiores a 30.000 euros. Por
otro lado hay enormes cuentas de los millonarios, y el rescate de los bancos era en
realidad un rescate de los depósitos delos millonarios que no quedaban protegidos por
los sistemas estatales de garantía de depósitos, de haber caído los bancos. No benefició
a la mayoría de la gente, la mayoría de los ahorros de la gente estaban seguros. Eran los
millonarios y los multimillonarios los que habrían perdido, y se hubiera dejado caer a
los bancos.
Deberíamos pedir la cancelación de todas las deudas, tanto públicas como privadas,
salvo tres clases de deudas que deberían ser preservadas. Las empresas no podrían negar
sus salarios a los trabajadores; la gente debería tener un año de renta anual garantizada
mediante los fondos de garantía, y las compañías y los ricos no deberían quedar
amnistiados de los impuestos que deben. Toda la deuda debería ser cancelada, tanto la
de tarjetas de crédito, hipotecas y la estatal.
¿Cuál sería el efecto? Las empresas muy apalancadas, las empresas muy endeudadas
podrían reanudar la actividad económica. Las finanzas del Estado volverían a ser
solventes. Los consumidores podrían volver a gastar porque ya no deberían tanto. El
sistema bancario paradójicamente sería más líquido, puesto que su ratio de obligaciones
en relación con las reservas en forma de depósitos en el Banco Central sería mucho
mejor, y el poder de la clase rentista quedaría quebrantado.
Así que, en suma, lo que digo es que la lucha por la democracia directa forma parte de
la memoria perdida de la socialdemocracia. La gente olvida lo que defendía en un
principio. Las viejas formas con las que la gente se ha obsesionado, la república
parlamentaria o la república soviética, no son propias del siglo XXI. Ahora la
democracia directa es perfectamente posible con el teléfono móvil, todo el mundo puede
votar fácilmente, no hace falta reunir a todo el mundo en la plaza de Atenas, puedes
tener una plaza virtual. Debemos vencer la batalla de la democracia en su sentido
original, si hemos de hacer algún progreso.
Preguntas y respuestas.¿Es Atenas la única referencia posible en términos de democracia, acaso la especia
humana no ha vivido cientos de miles de años en condiciones de democracia primitiva,
en sociedades de cazadores recolectores? ¿Qué decir de los Iroqueses
norteamericanos? Si Atenas es tan buen ejemplo, ¿cómo es que las mujeres no podían
votar, había esclavos, etc? Y en segundo lugar, ¿es realmente posible democratizar la
Unión Europea? No deberíamos destrozarla y construir algún tipo de Unión Europea
Socialista.Bien, trataré de responder a ello. Tienes razón al decir que algunas sociedades tribales
son democráticas en cierto sentido. Lo que era particular de la democracia griega es que
era una democracia dentro de una sociedad de clases, con una sociedad con intereses
contrapuestos entre el campesinado y los esclavistas, y al contrario que en Roma, era el
campesinado el que dominaba mediante la democracia.
Era el campesinado y los artesanos los que mandaban. Tienes razón en que había cuatro
categorías de personas que no tenían derechos legales: niños, mujeres, extranjeros y
esclavos. Pero nadie propone que restrinjamos los derechos políticos ahora. La cuestión
es tomar los aspectos positivos, la idea, como CLR James la presentó, de que cualquier
cocinero puede gobernar. Cualquiera puede ser elegido para gobernar, no hace falta una
cualificación especial. Escoge a la gente al azar y que decidan. Esa es la lección
positiva. Por descontado que no propongo que reinstauremos la esclavitud y otras leyes
Atenienses.
Por lo que respecta a la UE. Recuerda como estaban operando los socialdemócratas en
Rusia y Alemania. En los tiempos del programa de Erfurt, la Federación Alemana se
acababa de establecer, pero en términos muy poco democráticos. Podrían optar por
decir, oh, destruiremos la federación alemana y volveremos a Baviera e instauraremos el
socialismo en Baviera y Wurttemberg. No decían eso. Reconocieron que la clase
dominante había instaurado una unión y que lucharían por el poder dentro de esa unión.
Si miramos a Rusia, no dijeron, vamos a dividirnos en un montón de pequeños estados,
dijeron, vale, vamos a darles el derecho de autodeterminación, porque cuando intentaron
ejercer este derecho contra el gobierno socialista no fue muy buena idea. Así que
defendieron la unión territorial. No digo que mantengas la estructura institucional de la
UE, lo que digo es que sería un desastre que las clases trabajadoras de Europa que no
estuviera unida, que no fuera una Unión. Y cambias la estructura institucional, pero
volver a los Estados Nación sería un desastre, y debemos oponernos a cualquier
tendencia a demonizar la UE que al mismo tiempo resucite al Estado Nación, porque el
Estado Nación es peor.
Otra pregunta sobre la democracia directa. ¿Qué pasa con Suiza, no tienen
mecanismos de democracia directa, y sin embargo sigue siendo un Estado burgués
conservador convencional?La democracia no garantiza que gobernará la clase obrera. Lo que hace es aportar el
marco más favorable para el movimiento obrero, pues existen los menores obstáculos
posibles para que la clase obrera ejerza el poder. No puedes borrar de un plumazo la
actual estructura de clases de la sociedad. Si la estructura de clases de la sociedad no es
favorable al movimiento obrero, entonces no triunfará por mucha democracia que haya.
Y eso se puede ver en los Estados Unidos donde hay estados con Constituciones muy
democráticas, pero ni la estructura de clases ni la ideológica son favorables. No implica
que la clase obrera gobernará, pero es mejor tener un sistema en el que, cuando la clase
obrera sea más consciente, pueda ejercitar el poder de esta forma.
-Pregunta: Puede que no tenga esto fresco en la memoria, ya hace tiempo que lo he
leído, así que puedo equivocarme. ¿Pero de verdad afirma que toda su conferencia se
halla inserta dentro de la tradición marxista?-Ciertamente afirmo que los aspectos económicos son marxistas, y que los políticos son
los mismos que propugnaba la izquierda proletaria del partido socialdemócrata alemán.
-Bien. Toda esta idea de los vales laborales, ¿acaso no criticó Marx en “La Miseria de
la Filosofía” a Proudhon por estas ideas y después Engels en el Anti-Duhring contra
Eugen Duhring, puesto que lo que es un equivalente, todavía es un cambio, pero lo que queremos
es socializar la producción e implantar valores de uso que no puedan ser comprados ni
vendidos…. Por supuesto es una transición….Hay que distinguir lo que Marx criticó y lo que veía como positivo. Criticó a Proudhon,
pero apoyó a Owen. Owen también defendía los vales laborales. La diferencia es que
Owen los defendió en un sistema de productores asociados que gobernaban la sociedad,
no en una sociedad de productores independientes.
La idea de implantar vales laborales sólo se vuelve no capitalista si se produce la
abolición del trabajo asalariado y en el largo plazo si los vales son intransferibles.
Cuando hablaba del sistema de Owen, Marx dijo que los vales laborales de Owen no
eran más dinero que un billete de teatro es dinero. La cuestión es que no circulan. En
última instancia los vales laborales son concedidos por la sociedad a cada individuo en
proporción al número de horas trabajadas. Te devuelven, dice Marx, del almacén
común, bienes que requieren la misma cantidad de trabajo, y dice sí, que esto aún resta
en el principio de igualdad en que se basa la sociedad burguesa. Pero va a haber un
prolongado periodo histórico antes de que se pase a un estado en el que pueda regir otro
principio diferente. Podemos verlo en el caso de bienes de la sociedad de la
información, como la música que se descarga uno de internet o el software libre, ahora
podemos ir hacia la distribución gratuita.
Pero es una ilusión pensar que uno puede
pasar a una distribución ilimitada de bienes en un contexto de recursos naturales
limitados. No puedes hacer eso, hay que establecer cierta probabilidad entre el esfuerzo
que uno hace y lo que recibe.-¿Qué pasa si alguien trabaja más rápido o mejor que otro, van a cobrar lo mismo?Marx dice que si alguien trabaja mejor o más rápido, obtienen ingresos mayores, están
realizando más trabajo y por lo tanto tienen más ingresos, y por lo tanto cualquier
principio de igualdad aún radica en la desigualdad entre los individuos. Pues algunos
individuos, como dice Marx, son más vigorosos o más rápidos que otros, y por lo tanto
obtienen más ingresos que otros. Pero añade que se avanzará al principio de “a cada
cual según su necesidad”. Algunas personas han interpretado mal el término
“necesidad” como si significara distribución gratuita. No significa eso. Significa que si
alguien tiene una familia mayor, si alguien está enfermo o capacitado, si existe alguna
necesidad determinable de manera objetiva, serán compensados. Pero eso es algo que el
movimiento obrero ya ha ganado, en principio al menos, en Europa, aunque no en
EEUU, pero en Europa la mayoría de los Estados del Bienestar reconocen el principio
de necesidad y de la satisfacción de las necesidades en un cierto número de campos, en
sanidad, educación, etc… Así que el principio de la necesidad no es la cuestión crítica,
la socialdemocracia ya ha triunfado en muchos lugares, lo que no ha conseguido es la
abolición de la explotación.
-¿No existe un peligro con el dinero electrónico circulando?Eso es justamente lo que digo de la idea de Marx de que los créditos laborales no son
transferibles. Existe una contabilidad de lo que obtienes por tu trabajo y de lo que retiras
de los almacenes comunes, con una cierta proporcionalidad. Pero no lo puedes usar para
explotar a otra gente, no lo puedes usar como capital. Van marcados con tu nombre, en
ese sentido. Es una cuestión de software, de si el software permite transferencias.
-Pregunta sobre David Schweickart el socialismo de mercado y su crítica.
El (el hombre de la audiencia) pregunta si estoy familiarizado con el trabajo de
Schweickart sobre el socialismo de mercado.Lo estoy. Las primeras fases de lo que propongo no encontrarían objeción alguna por su
parte, según creo. Veo que a largo plazo el socialismo de mercado es una forma social
inestable. En principio puedes establecer empresas titularidad de los trabajadores, pero a
menos que el movimiento sindical europeo consiga un proceso rápido de fusiones y la
formación de sindicatos europeos industriales, como un solo sindicado europeo que
hace yogurt en la que Farmalat, Danone y otras empresas del sector se unan, que haya
un solo sindicato de ferroviarios que se ocupe de todas las vías férreas, que haya un solo
sindicato de trabajadores de las líneas aéreas que se ocupen de todas ellas, aboliendo la
competición entre sectores, existe un peligro de que las cooperativas independientes
puedan regenerar gran parte de la dinámica de la economía capitalista. Así que, a menos
que la fase de las cooperativas sea un periodo transitorio para lo que Marx llamó “libre
asociación de los trabajadores”, la fusión voluntaria en grandes sindicatos, no creo que
esto fuera sostenible durante más de 50 o 60 años. Generaría el tipo de tendencias que
se acabaron dando en Yugoslavia.
(
Preguntas sobre la huelga general y los comités de huelga, muchas de ellas inaudibles;
escepticismo sobre la “democracia de teléfono móvil” sobre reemplazar los soviets, etc,
al final hay una pregunta sobre las tasas de explotación que Cockshott y Cotrell
calcularon para el Reino Unido hace 20 años, ¿son los cálculos más recientes?)Hubo un montón de preguntas… David Zachariah, que está aquí (entre la audiencia)
creo que ha realizado cálculos en Suecia sobre la tasa de explotación podéis
preguntárselo a él, ha hecho cálculos en valores laborales aquí. Así que le cedo el turno.
Pero existen ciertamente ocasiones donde los consejos de trabajadores se han formado
en huelgas generales, en grandes huelgas. Pero son distintas de los soviets, sin embargo,
por que no son órganos de poder estatal. Sólo se convierten en órganos de poder estatal
cuando están armados y mandan fuerzas militares, y esas fuerzas militares pueden hacer
cumplir la voluntad de los soviets y eliminar a los que se opongan ¿no?
Los soviets en Rusia podían poner a los Blancos contra el paredón. Los demás no
pueden, no son órganos de poder estatal. En mi opinión es peligroso extrapolar una
organización temporal que no tiene poder estatal a una constitución con poder estatal
entendido como el poder de disparar a la gente. Y se puede ver la diferencia entre un
comité de huelga y los soviets cuando se recuerda Kronstadt.
-Cuando hablais de democracia directa y de economía planificada y demás, hay
muchas cuestiones aquí (a un nivel abstracto) pero ¿qué tipos de movimientos de
masas, qué tipo de dinámica queréis traer, tenéis algún tipo de…-Es muy difícil decir como puedes hacer que se produzca un cambio en una… sociedad
o un continente entero. Pero yo creo que a menos que tengas una visión de a dónde
quieres ir, nunca vas a llegar allí. En cuanto a las fases, creo que es esencial formar un
partido socialista de izquierdas unificado a nivel europeo que se presente a las
elecciones europeas como un partido único, en vez de partidos políticos nacionales
afiliados unos con otros, y que tienes que ganar la batalla ideológica por el principio
democrático. Tienes que hacer pensar a la gente que sí, podemos cambiar las cosas,
podemos gobernarnos nosotros mismos, no necesitamos a los políticos. Es un gran
obstáculo, porque los EEUU ha redefinido la democracia por la democracia a la
americana, y eso implica una forma de gobierno particular que no conserva su sentido
originario. Así que creo que necesitas un partido socialista europeo que tenga un
programa de democracia radical como su objetivo principal, y tratar de ganar a más
gente que sólo a la clase trabajadora, porque la democracia radical tiene mucho más
apoyo potencial que el que se limita a la clase trabajadora.
Pero más allá de una afirmación muy general como esa, no iré más allá.
-Creo que hay otra cuestión que no respondió, al chico que ha hablado antes, ¿qué
pasa con esta democracia de “teléfono móvil”, que es algo atomístico, que no hay
mucha interacción ni diálogo entre las personas, interacción colectiva.Algunos de estos son verdaderos problemas de escala. Hay decisiones que hay que
tomar que no son locales. Es fácil decir, vale, vamos a seleccionar gente de un pueblo o
una ciudad pequeña para debatir algo. Cuando decís que vais a tomar a la gente de un
país incluso del tamaño de Suiza para debatir una cuestión nacional muy trascendente,
no se puede hacer localmente. Si tratáis de construirlo sobre una base local, y después
de modo indirecto lo que estáis haciendo es construir una estructura jerárquica de
concentración del poder cuando lo que queréis es devolver el poder a las masas.
No veo razón por la cual no podemos tener debates, debates públicos entre audiencias
seleccionadas al azar, debatiéndose las cuestiones en Televisión y que después la gente
pueda votar. Si se miran las elecciones actuales, la única parte interesante de una
elección, son los comentarios de las audiencias sobre los debates. Si tienes estos debates
sin políticos al frente, y debates las cuestiones, creo que esa es la única manera en la que
se puede superar el problema de escala en una sociedad moderna, no vivimos en tribus,
no vivimos en ciudades estados, debemos de hacer las cosas de otra forma, aunque
debamos aprender de los errores del pasado.
Respecto a la pregunta de la importancia de la transformación psicológica de la gente,
¿no se volverán a reconstruir las antiguas estructuras, si no hay transformación
psicológica, aunque hayas cambiado las condiciones externas?Creo que los valores sociales que dominarían en un tipo diferente de sociedad también
serían diferentes, pero es difícil especula en que modo lo serían sin experimentarlo. Pero
creo que hay un riesgo que se ha asumido en el pasado por gente como Che Guevara,
que al enfatizar una nueva moral socialista quería que el cambio psicológico superara
las barreras institucionales e ir más allá de lo que las instituciones pueden hacer. El
riesgo de que hagas esto es que te vuelves como las Iglesias Cristianas, que enseñan a la
gente a ser virtuosa en un mundo que les fuerza a no serlo. A menos que crees una
sociedad donde la virtud sea recompensada.
No me refiero a una suerte de sacerdocio global, pero me parece que tenemos que
cambiar nuestro modo de pensar, y no sé si la reorganización de las condiciones
externas es suficiente. Ciertamente creo que hay una necesidad de, llamémoslo así, una
transformación psicológica. ¿No estás de acuerdo?En cualquier sitio en que haya un movimiento revolucionario serio, y podemos tomar
tres ejemplos. Si tomamos le Revolución Inglesa, estaba asociada con un movimiento
ideológico muy vigoroso que tomó forma religiosa en su día. Si miramos a la revolución
en Irán, ocurrió algo parecido. En la Revolución Cultural China hubo un intento muy
serio de cambiar la psicología. Así que cualquier revolución social importante genera
tentativas de cambiar la psicología. Ahora bien. Lo exitosos que pueden ser a largo
plazo, no lo sé, pero es una parte inseparable del proceso. Estoy de acuerdo.
-Cuando tienes una enorme economía planificada, uno de los principales problemas es
reunir la suficiente información para tomar decisiones sensatas. ¿Tenéis algún consejo
sobre como lograrlo?En un nivel es una cuestión técnica. Los medios para resolverla ya los tenemos con la
informática e internet. Los detalles de los insumos en cada proceso de producción están
registrados en los ordenadores locales de las compañías que los adquieren.
Pero el secreto comercial implica que la información que se reúne localmente no está
disponible al púbico, así que una forma de tratar con ello es romper el secreto comercial
que existe y hacer que esta información sea disponible para todo el mundo. Y ese era
uno de los grandes objetivos de (Viktor” Glushkov, que fue el pionero informático
soviético que en los 60 trató de persuadir a los dirigentes soviéticos que implantaran lo
que ahora entendemos como internet. Y defendía cosas que ahora parecen obvias, que
en las bibliotecas y lugares públicos hubiera terminales de ordenador donde la gente
pudiera ir y buscar cualquier tipo de información. Decía que toda la información de la
economía debía ser registrada en lo que sería esencialmente un internet libremente
abierto al público. Y creo que tenía razón, ese es el camino.
Si le entiendo bien, ha dicho que no deberíamos abolir la propiedad privada sino que
debíamos dedicar nuestras energías a la abolición del trabajo asalariado. ¿Qué
hacemos con la propiedad privada?Bueno, tiene que preguntarse que es la propiedad privada si no tienes derecho a explotar
el trabajo ajeno. Supón que eres un residente acaudalado de Savanah, (En Georgia,
Estados Unidos) en 1960 y tienes esclavos y acciones sobre plantaciones esclavistas,
¿vale? Puedes comerciar con esas acciones. Y es lo que ocurría. Tan pronto como la
esclavitud fuera abolida, tus acciones no valdrían nada por que son una representación
de una relación social que ya no existe.
-¿Pero qué pasa cuando islas enteras son propiedad de familias?Actualmente hay tres mecanismos de explotación en los que se basa la sociedad
presente. Uno de ellos es la explotación directa del trabajo asalariado. La segunda es la
explotación de la gente mediante la deuda. Y la tercera es la renta, poder exigir una
renta por el uso de la tierra. Lo ideal sería nacionalizar toda la tierra. Pero existen ciertos
riesgos políticos si se trata de hacerlo cuando estamos en un área en la que un número
significativo de personas son campesinos independientes. No querrás entregar a la
población campesina en manos de la reacción si amenazas con expropiarles sus tierras.
Así que una política más efectiva es introducir lo que el movimiento de reforma agraria
en EEUU llamaba “full site value taxation”, en la que introduces un impuesto sobre la
tierra que es proporcional a la renta que obtienes sobre la tierra, así que efectivamente
confiscas la renta de la tierra.
Quieres decir que cuanto más tierra tienes, más impuestos…Escocia todavía tiene un patrón feudal de propiedad de la tierra, con un puñado de
familias aristocráticas, duques y “earls”, que son dueños de la mayor parte del país. Y
obtienen sus ingresos haciendo pagar una renta a los arrendatarios. Y si el arrendatario
recibe una subvención de 2000 libras de la UE para mejorar su tierra, el duque subirá la
renta diciendo, oh, ahora percibes dinero de la UE, pues si sacas 2000 libras, la renta va
a subir 2000 libras. Por lo tanto, ese derecho a la renta de la tierra debería ser
neutralizado diciendo, vamos a poner un impuesto del 100%.
Así que no les quitas la tierra, la pueden retener nominalmente pero no van a sacar
ninguna renta de ella ni tendrán poder sobre ella. Es una mera concesión política, no vas
a dar a la derecha la opción de la propaganda que dirá, te van a quitar tu casa, estos
socialistas, te van a quitar la tierra, te van a quitar el coche. Y si dices que vas a abolir la
propiedad privada, eso es lo que va a decir la derecha. Tú quieres abolir la explotación.
Si se presenta así, ¿quién va a decir que es bueno mantener la explotación? Si dices, voy
abolir la propiedad privada, mucha gente los esgrimirá como el hombre del saco y tienes
ese riesgo político.
Hay que concentrarse en lo que quieres conseguir, y no en la forma. Hay que hacer las
cosas de modo que se le ponga difícil la propaganda a la derecha. Quieres conseguir ese
efecto, pero cambias los términos.
Dices que la UE es la alternativa para Europa. Creo que la UE es cara y muy poco
democrática, y cada vez se aleja más del socialismo, y tiene partidos nacionalistas…
así que me pregunto, ¿cómo puedes decir que la Unión es la alternativa para Europa?-La vigente constitución de la UE es muy poco democrática pues el parlamento tiene
poderes muy limitados, no puede promover legislación general, no elige la comisión
entre sus miembros, no puede elevar impuestos generales, etc. Y eso aparte de lo poco
representativa que ya de por si es la democracia parlamentaria. Lo que digo es que
tienes que concentrarte en el área geográfica que constituye una economía unificada y
unir a las clases trabajadoras en esa área para luchar por derechos comunes y objetivos
comunes que ahora sólo se pueden conseguir a esa escala. Ninguna nación individual
puede esperar resistir al capital global, solo puedes hacerlo a un nivel continental. Y
promover una estrategia de digamos, en Grecia nos lo montaremos solos como dice el
KKE, puedo entender los incentivos que tienen para hacer eso, pero nunca funcionaría a
largo plazo, pues cualquier país socialista independiente se vería sometido a tal presión
del capital internacional que no sería posible que tuviera una economía socialista
internamente, sólo si partes de una gran escala puedes hacerlo. Si hay un movimiento
político a la izquierda en China pueden hacerlo, y nadie podría detenerles. Pero Suecia,
Irlanda, no, no sería viable a esa escala.
Conferencia pronunciada en Noviembre de 2010.